Personajes de videojuegos que parecen sacados de películas


Los videojuegos son hoy por hoy el sector cultural más importante, el que más dinero genera en el mundo, incluso por encima del cine y de la música. La era dorada de los juegos para PC, consolas y terminales móviles ha hecho que en cualquier casa haya un gamer dispuesto a gastarse su dinero en la última novedad. Las tecnologías han permitido seguir avanzando también a la manera de crear estos videojuegos, y hoy por hoy son como auténticas superproducciones.

No es de extrañar, por tanto, que muchos de ellos se hayan llevado a la gran pantalla, aunque no necesitan de una adaptación al cine para representar buenas historias, para tener diálogos espectaculares, escenas de acción increíbles e inmersivas y sobre todo, personajes muy carismáticos. Algunos de los protagonistas de videojuegos se han convertido en auténticos mitos e iconos populares, como Lara Croft, Super Mario o Sonic. Y en la última década también hemos encontrado a nuevos personajes dignos del mejor blockbuster.

 

Joel, The Last  of Us

Cuando apareció hace unos años, The Last Of Us supuso una auténtica revolución para consolas, un juego en el que la historia y la emoción parecían estar por encima incluso de la acción. Su protagonista, Joel, tiene que proteger a una pequeña niña llamada Ellie, que puede ser la última esperanza del ser humano para acabar con un virus pandémico que convierte a la gente en zombies infectados con ganas de comer el cerebro a todo lo que se muere. En su viaje a través de los Estados Unidos, el malhumorado y antes peligroso Joel entablará una extraña e inevitable amistad con la niña, algo que nos hará empatizar tanto con él como con ella.

 

CJ, Grand Theft Auto San Andreas

Carl Johnson, también conocido como CJ, fue el primer protagonista afroamericano de la saga de juegos GTA, en este caso, en su versión San Andreas. Alto y muy musculado (dependiendo, eso sí, de cómo le tratemos a lo largo del juego), CJ es el segundo al mando en una banda de gánsters que trata de controlar la ciudad ficticia de San Andreas, donde el vicio y la violencia están a la orden del día. A la hora de crear a este personaje, la gente de Rockstar decidió darle una personalidad menos violenta y mucho más asertiva que la de los anteriores protagonistas de la saga. Así uno puede empatizar mucho mejor con CJ, aunque es cierto que a veces tendremos que tomar decisiones difíciles, lo cual hace que el juego sea aún más divertido.

 

Solid Snake, Metal Gear Solid

Un joven soldado con un pasado confuso y con una habilidad especial para infiltrarse en cualquier lugar y acabar con montones de hombres sin siquiera ser detectado. Solid Snake lleva con nosotros ya un par de décadas, pero sigue siendo uno de esos iconos populares imposibles de olvidar. Tal vez su historia no sea tan profunda, por el modo de juego en el que participa, pero su personalidad se deja ver cada vez más en las consecuentes entregas de la saga Metal Gear Solid, y todo el que ha jugado a uno de estos juegos ha sentido la tensión de ser Solid Snake, y el poderío de acabar con los enemigos como él lo hace.

 

Nathan Drake, Uncharted

Cuando Naughty Dog lanzó Uncharted y pudimos conocer al bueno de Nathan Drake, todos pensamos lo mismo: es una mezcla entre Indiana Jones y Lara Croft. Es indudable la influencia de ambos personajes en Drake, que se parece más seguramente al aventurero interpretado por Harrison Ford, pilar básico para la posterior creación de la protagonista de Tomb Raider. En todo caso, Drake tiene su propia personalidad, pendenciera y aventurera, con un humor muy propio que también ha ido evolucionando a lo largo de su saga. La película sobre Uncharted lleva meses rondando las noticias especializadas, y no sería extraño que en poco tiempo podamos ver a Nathan Drake también en la gran pantalla.

 

Marcus Fenix, Gears of War

Todos conocemos la historia. Un soldado de élite, seguramente el mejor de todo el ejército, que comete una negligencia entendible y humana y cae en desgracia, pero que debe recuperar su puesto para mantener la seguridad de la propia humanidad. Así se presenta al líder del pelotón delta, Marcus Fénix, un tipo ingenioso, con una habilidad casi sobrehumana con las armas y una valentía que va más allá del puro deber. De hecho, Fénix nunca se considera así mismo un héroe, aunque es evidente que ha hecho cosas increíbles por los demás. Prefiere ver sus acciones como una necesidad, la única respuesta posible ante una situación que requiere decisiones importantes y valientes.